Mucho se habla de la EMPATÍA, está de moda
colar en cualquier tema referido a nosotros mismos o para despellejar a alguien
el "es que no es empático", o "yo soy muy empática". Parece
como que ser empático ya nos salve de todos nuestros pecados, y nos convierta
automáticamente en buenas personas.
Obviamente ser empático es estupendo,
siempre y cuando no derive en un contagio emocional, por el que al final, en
vez de comprender el sufrimiento ajeno lo sentimos como propio, convirtiéndonos
en "la novia en la boda, el muerto en el entierro....". Dejemos la
empatía como esa cualidad de comprender, dejándola fuera del concepto
"sentir".
Pero en realidad lo que me interesa ahora
no es la cualidad empática. Lo que me preocupa es la frialdad emocional, el
embotamiento afectivo, la pérdida de capacidad de sentir emociones básicas y
necesarias. A veces ocurre, por distintas causas, en algunos casos son
orgánicas, como en la esquizofrenia, en otras son sobrevenidas por situaciones
traumáticas o el cúmulo de emociones negativas que hace que la persona se
anestesie emocionalmente.
A continuación tenemos algunos conceptos
que se podrían denominar "trastornos de la emotividad":
APLANAMIENTO AFECTIVO o indiferencia
emocional. En este caso la persona se muestra indiferente al
sufrimiento/bienestar propio y de los demás. Se presenta en esquizofrenia,
retraso mental, autismo y en trastornos orgánicos cerebrales.
FRIALDAD EMOCIONAL: Común en los
sociópatas, que sí tienen sentimientos propios pero son incapaces de sentir el
sufrimiento de los demás.
SENSACIÓN DE "NO SENTIR NADA" es
diferente del aplanamiento afectivo y de la frialdad emocional ya que el
individuo es consciente de esta falta de emociones y sufre por ello. El sujeto
se siente vacío y muerto, ante la incapacidad de sentir nada, ni alegría ni
dolor, ni cariño por amigos o familiares.
DISOCIACIÓN O INCONGRUENCIA IDEO-AFECTIVA:
no existe una equivalencia entre lo que la persona siente y piensa o en cómo lo
manifiesta y la emoción en sí misma.
RISA O LLANTO INISTENSIONAL, PARATIMIA O
INADECUACIÓN AFECTIVA: la expresión emocional no se corresponde con el contexto
en el que se produce y la expresión emocional que desencadena.
PARÁLISIS PSEODUBULBAR, LESIÓN EN LOS
TRACTOS CORTICOBULBARES. el paciente tiene episodios de risa o llanto, o ambos
a la vez que son difíciles de interrumpir una vez que se desencadenan. (No
guardan relación con un estado emocional concreto).
PROPORCIONALIDAD EMOCIONAL: relación
cuantitva entre el estímulo y la respuesta emotiva.
RIGIDEZ AFECTIVA: el sujeto no se
desprende fácilmente de un estado emocional y permanece bajo su influencia a
pesar de que cambie la situación o contexto en el que se ha dado esa reacción
emocional. También se llama adherencia emocional, y supone presentar siempre el
mismo tono afectivo independientemente de la situación. Se presenta en
demencias y enfermedades cerebrales.
IRRITABILIDAD, TENDENCIA ESPECIAL AL
ENFADO. el sujeto se molesta con facilidad ante las menores dificultades de la
vida
MAL GENIO: actitud de tendencia al enfado
muy prolongada, sin estar mediada por factores específicos
MAL CARÁCTER: rasgo de personalidad, con
tendencia a la ira y el enfado. Viene mediado por la forma de interpretación su
mundo, a las personas y el contexto.
AMBIVALENCIA EMOCIONAL: emociones opuestas
frente a una situación que coexisten, como podrían ser el amor-odio.
PUERILIDAD: estado eufórico, con tendencia
a la superficialidad (también se conoce como moria), y se presenta en lesiones
del lóbulo frontal, esquizofrenia, retraso mental, intoxicaciones metabólicas e
intoxicación con estimulantes.
LABILIDAD EMOCIONAL: continuos cambios en
el estado de ánimo sin estar presente un estímulo desencadenante, pudiendo
pasar de la risa al llanto. Puede suceder en trastornos como el bipolar (fase
manía), delirium, lesiones del lóbulo frontal y demencias. Se asocia con la
incontinencia emocional (no puede controlar sus emociones). Es propio de la
personalidad limítrofe.
ANHEDONIA: incapacidad para experimentar
placer. Es uno de los síntomas nucleares de la depresión.
ALEXITIMA: incapacidad para reconocer y
expresar las propias emociones. Esa "frialdad emocional" al no saber
dar respuesta, les puede causar un empobrecimiento en sus relaciones
personales. Suelen presentar quejas de tipo psicosomático. Puede estar motivado
por una situación traumática vivida o por una depresión enmascarada.
¿EXISTE TRATAMIENTO?
Enseñar a las personas a identificar sus
emociones es posible, también es posible "reconectar" ese cable que
debería unir la situación-su procesamiento cognitivo y su expresión emocional.
Muchas personas han crecido en ambientes
en los que socioculturalmente la expresión de emociones no estaba bien vista, y
han suprimido o intentando obviar dichas emociones hasta dejarlas dormidas en
su interior. Otras veces el miedo a sufrir ante la emoción paraliza al
paciente.
Es posible, y siempre recomendable,
intentar abordar el problema de la inadecuación/ausencia de responsabilidad
emocional, ya que el hombre es mente y también es emoción, y la emoción, sea
buena o sea mala, nos ayuda a vivir una vida plena, aceptando que todo el
abanico de emociones que experimentamos son parte de algo tan bello como es
sentir.